Inmigrantes ilegales marroquís con antecedentes pinchan en el cuello a una joven para robarla en Granada
Dos inmigrantes ilegales de nacionalidad marroquí y con antecedentes por robo con violencia han pinchado con un objeto punzante a una joven estudiante a la que robaron el móvil. La Policía Nacional ya ha detenido a los dos delincuentes, ambos de 19 años, por estos hechos, acaecidos en Granada. Por el pinchazo, la mujer tuvo que ser traslada a un centro hospitalario.
Los agentes del 091 comisionaron a las patrullas de servicio hasta una calle donde, según informaba un varón que auxiliaba a la víctima, una joven había sufrido el robo de su teléfono y había sido lesionada. Según la mujer, caminaba por la calle cuando un varón le preguntó la hora y, «cuando extrajo su teléfono móvil para decírsela, le propinó un tirón y se lo sustrajo», según ha indicado la Policía Nacional en una nota de prensa.
La huida a la carrera la inició de inmediato, junto con otro varón, el cual se había quedado algo más retrasado. La joven estudiante echó a correr detrás de ellos para recuperar su propiedad y, pasado un tiempo, el hombre que le había pedido la hora previamente, «se giró y la golpeó en la traquea con un objeto punzante ocasionándole un corte y haciéndola caer al suelo».
Las patrullas comenzaron un dispositivo de búsqueda sobre los autores del robo violento al tiempo que la mujer era trasladada en ambulancia hasta un hospital donde fue asistida de las lesiones que presentaba y que finalmente no revistieron carácter de gravedad.
Poco después, una de las dotaciones, observó a dos jóvenes corriendo por la calle, también en el distrito Centro, quienes al percatarse de su presencia, intentaron cambiar de trayectoria. Los policías comprobaron que las características de éstos coincidían con las aportadas por la víctima y los detuvieron trasladándolos hasta las dependencias de la comisaría provincial.
Los dos detenidos, de nacionalidad marroquí y residentes ilegales en el país, cuentan con antecedentes policiales, también por robo con violencia y, tras ser puestos a disposición de la autoridad judicial, ésta ha decretado su ingreso en prisión. Mientras tanto, los agentes continúan con las pesquisas para localizar el teléfono móvil sustraído.